Alimentos: cómo y cuáles consumir

Para tener un cuerpo sano y una mente sana hay que consumir ciertos alimentos moderadamente



Hay cuatro sustancias que consumidas de manera desmesurada pueden ser nocivas para la salud:

1. azúcares (incluyen azúcar blanco y moreno, miel, siropes, sacarina, glucosa, maltosa y dextrosa),
2. grasas saturadas, hidrogenadas y aceites fritos de semillas,
3. productos lácteos
4. trigo.

Nuestra dieta es la principal causante de las enfermedades.
Tal como lo plantea la Medicina Ortomolecular, hay que proporcionar las sustancias necesarias. A nivel mundial es sabido que los habitantes del mediterráneo gozan de una mejor esperanza de vida gracias a su especial estilo de alimentación, que contiene bajas grasas, verduras, frutas, legumbres y aceite de oliva. Sin embargo el hecho de que logremos equilibrar los alimentos de nuestra dieta, no es sinónimo de que estemos alimentándonos como corresponde.
La Medicina Ortomolecular ha ido cobrando fuerza a lo largo de los años. Fue el doctor Linus Paulig, Premio Nobel y catedrático de la universidad de Stanford en Estados Unidos quien acuñó el término, que significa proporcionar a cada persona el nivel óptimo de sustancias contenidas en nuestro organismo a fin de evitar trastornos en la salud y corregir los existentes.

La nutricionista Cala H. Cervera, autora del libro Nutrición Ortomolecular, llama la atención acerca de algunos alimentos que consumimos diariamente y con los cuales deberíamos tener más cuidado. Según plantea, hay cuatro sustancias que consumidas de manera desmesurada son nocivas para la salud:

1. Azúcares: “estos incluyen azúcar blanco y moreno, miel, siropes, sacarina, glucosa, maltosa y dextrosa. Éstos se encuentran en productos refinados e integrales de pastelería, galletas, algunos cereales y panes, refrescos, salsas y embutidos, entre otros”.
2. Grasas saturadas, hidrogenadas y aceites fritos de semillas: “Éstas se encuentran en el queso, leche y carne roja, margarina, comida prefabricada y bollería, respectivamente”.
3. Productos lácteos: “éstos, a parte de no ser recomendables por lo anteriormente mencionado sobre su alto contenido en grasas saturadas y pro inflamatorias, suelen producir una gran variedad de problemas para la salud”.
4. Trigo: “éste se encuentra en el pan, bollería y pasta, principalmente. Este cereal es un gran irritante del sistema digestivo”.

Beneficios de la comida orgánica:

1) La comida orgánica cobra cada vez mayor cantidad de adeptos. El secreto está en la forma de cultivar los alimentos.

2) Se trata de comida que cuida tanto la salud de los consumidores como el equilibrio del medio ambiente en que se producen. El gran beneficio de los alimentos orgánicos es que están absolutamente libres de residuos químicos. En los alimentos orgánicos no están permitidos los aditivos y conservantes (salvo los naturales); plaguicidas ni fertilizantes; tienen menos o nulos residuos de medicamentos veterinarios; no contienen hormonas; ni metales pesados (presentes en suelos y aguas) y no pueden ser irradiados. Algo que evidentemente reviste un gran beneficio para quienes los consumen.

El tema está bastante avanzado en Europa. Datos estadísticos del Reino Unido indican que el mercado de comida orgánica ha tenido un crecimiento de 55% entre 1999 y 2000. Según el informe de INDAP (Instituto Nacional de Desarrollo Agropecuario), existen nueve países que cuentan con un cultivo más profesionalizado de alimentos orgánicos:

Argentina: vino, aceite de oliva, jugos concentrados, azúcar, miel de abeja, dulce, ajo, frutas secas, leguminosas y cereales, mate.

Paraguay: azúcar, sésamo, leguminosas, mate, palmito, fécula de mandioca.

Uruguay: productos de arroz procesado, aceite de oliva, olivo, miel de abeja, productos lácteos, vino, bife procesado.

Chile: miel de abeja, hortalizas y frutas congeladas, vino, jugos concentrados, hortalizas frescas, ciruela seca, frutas secas, hierbas.

Brasil: aceite de palma, azúcar morena, pasta de tomate, ketchup, café, soja, polvo de fruta seca, mate, cachaza (licor), palmito, lima fresca.

Bolivia: sésamo, achiote (especias, colorantes para cocina)

Perú: café, cacao, amaranto, pasta de tomate, nuez de Brasil, aceite de nuez de Brasil, palmito, polvo de maca, aceite de oliva.

Ecuador: pasta de plátano, amaranto, plátano, alimentos auxiliares de cereales, hongo, café, hierbas, camarones, azúcar.

Colombia: café, pasta de mango, azúcar, palmito, vinagre de caña de azúcar, plátano, aceite de palma, dulce, hortalizas frescas.

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